Verónica González
Directora | Psicóloga | Inspiradora de Vida
Otro Rumbo Fundación
Una relación de pareja es un viaje emocional y emocionante lleno de altibajos. Algunas parejas transforman los desafíos en oportunidades de crecimiento, mientras que otras se quedan atrapadas en un ciclo continuo de sufrimiento.
La diferencia fundamental radica en los cimientos de la relación. Es crucial considerar el estado emocional de cada uno al inicio de la relación y, para ello podemos asumir el rol de investigadores, planteando los siguientes interrogantes sobre cómo llega cada uno: ¿Existen heridas abiertas de relaciones pasadas? ¿Traumas infantiles o conflictos familiares sin resolver? ¿Hay conocimiento de sí mismo y de lo que se quiere a futuro? ¿Existe claridad en las prioridades? ¿Tiene sueños y metas y trabajo por ellos? Y lo más importante, ¿Sabe qué tipo de persona quiere en su vida?
Es un mito pensar que la vida es una serie de eventos aleatorios controlados por la “suerte”. En realidad, nuestras decisiones, conscientes o no, determinan nuestro camino. La tendencia a buscar culpables externos por nuestros errores indica una falta de autoconocimiento y propósito.
Mientras recorremos las etapas de las relaciones pareja, reflexiona sobre lo que sostiene tu relación: ¿es amor o necesidad? Si aún no tienes pareja, es el momento de definir tus deseos.
Descubre las Etapas de una Relación de Pareja
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- El Chispazo: es ese momento mágico que conecta a dos personas, ya sea por atracción física, personalidad o inteligencia. Si la atracción es mutua, seguirán encuentros para conocerse mejor.
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- Ponerle Razón: ¡Una oportunidad para elegir bien! Conocerte a ti mismo y saber lo que quieres es esencial para elegir a la pareja que cumple tus expectativas. Evalúa lo que conoces de esa persona y decide si deseas continuar. Ignorar esta etapa puede llevar a sufras y te arrepientas en el futuro.
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- El Enamoramiento: Esta fase se caracteriza por la idealización y la minimización de defectos. Es importante mantener expectativas realistas para evitar desilusiones cuando la idealización se desvanece.
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- La Voluntad: A medida que la relación madura, la voluntad se vuelve esencial para mantenerla sólida. Los sentimientos fluctúan, y la voluntad es lo que sostiene la relación a través del tiempo y los desafíos de la vida.
Amor vs. Necesidad: ¿Qué Sustenta tu Relación de Pareja?
Ahora si, sin más preámbulos, puedes evaluar si tu relación se basa en amor verdadero o en necesidad, lo que es esencial para su sostenibilidad y el bienestar de ambos. A continuación, te presento puntos clave para reflexionar y sacar tus propias conclusiones:
Cuando la Necesidad Domina:
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- Dependencia: La necesidad puede generar una dependencia emocional o física hacia la pareja, limitando la autonomía personal.
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- Miedo a la Soledad: En ocasiones, el temor a la soledad impulsa a permanecer en una relación más por miedo que por afecto genuino.
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- Inseguridad: Las inseguridades personales pueden llevar a buscar validación constante en la pareja, en lugar de encontrarla en uno mismo.
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- Sacrificio Unilateral: Si constantemente sacrificas tus necesidades por las de tu pareja, podría ser indicativo de necesidad más que de amor.
Señales de Amor Genuino:
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- Voluntad de Dar: El amor se refleja en la generosidad desinteresada, ofreciendo al otro sin esperar recompensa.
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- Crecimiento Mutuo: El amor busca el desarrollo personal y de la pareja, fomentando el apoyo a metas y sueños compartidos.
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- Libertad: El amor verdadero respeta la independencia de cada uno, permitiendo que ambos miembros de la pareja crezcan individualmente.
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- Felicidad Compartida: En una relación amorosa, la felicidad de tu pareja es tan valiosa como la tuya, y los logros de ambos se celebran juntos.
Trabaja en Ti, Construye Tu Relación de Pareja
En conclusión, cada relación es única, un reflejo de la singularidad de sus integrantes. Cada persona tiene su propio proceso de crecimiento y desarrollo, y es a través de este viaje personal que se aporta al crecimiento conjunto de la relación. La construcción de una relación es un esfuerzo conjunto, un acto de equilibrio entre el yo y el nosotros.
Es posible que la reflexión consciente y racional se torne un poco confusa, pero no te preocupes, puede buscar espacios de orientación profesional, con un psicólogo, en los que te ayudaremos a encontrar tus respuestas y así ajustar, fortalecer y potenciar tu relación de pareja. La terapia individual y/o de pareja, puede ser una excelente alternativa para mantener y fortalecer la relación a lo largo del tiempo. Al igual que un jardinero experto que cuida de las plantas, un profesional puede proporcionar las herramientas y técnicas necesarias para nutrir y cultivar la relación. Porque al final del día, cada relación es un jardín único, y merece ser cuidado y apreciado en su singularidad.”
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